La relación causa-efecto es, aparentemente, bastante lógica en este caso: cuantos más móviles se vendan con acceso a internet, más se extenderá su acceso y mayor será la demanda, por ejemplo, en sus reparaciones.
Así, y teniendo en cuenta un estudio elaborado por Pingdom –un sitio web de monitoreo- en el que se afirma que el móvil ya supone el 10% del uso de la red en el ámbito mundial, no resulta descabellada la afirmación realizada por diversos expertos que confirman que 2013 será el año en el que los smarthpones sean los dispositivos elegidos mayoritariamente para conectarse a internet.
Incluso, los analistas que han participado en el Gartner Symposium de Orlando (EEUU) han aventurado que el 80% de los terminales móviles que se vendan en las próximas tres temporadas serán dispositivos inteligentes.
Igualmente, en este encuentro se ha definido que la tendencia es que los iPads superen al uso de las Blackberrys en el ámbito laboral en menos de dos años. Una idea ratificada por el hecho de que Apple ha vendido 12 millones de iPads y 32 millones de iPhones sólo en el primer trimestre del año.
Por regiones, y según indica también el estudio de Pingdom, Asia acumula una actividad a través de los dispositivos inteligentes que supone un 18% del total, frente al 5,15% que presenta Europa o el casi 15% de África. Unas diferencias que, al parecer, se justifican en la asequibilidad a la hora de acceder a uno u otro tipo de dispositivos de acceso a internet.
Igualmente, destaca que el incremento de este acceso a través de los smartphones está creando una brecha digital de género ya que, tal y como revela el estudio La brecha digital de género en España -realizado por el Observatorio e-igualdad de la Universidad Complutense de Madrid- son mayoritariamente los hombres quienes prefieren el móvil al PC para hacer todo tipo de consultas con una diferencia de 36,7 puntos.
Una diferencia que no se reduce ni entre los más jóvenes ni dependiendo de la formación recibida, ya que incluso se incrementa hasta los 42 puntos si se analiza la población con estudios universitarios.
Foto 1: CTISA
Foto 2: Servicio Técnico Tenerife